Leido en: http://pizarrasltc.blogspot.com/
No pudimos este fin de semana traer algo positivo de Pontevedra y no fue por no merecerlo, porque hay que decir el equipo hizo los deberes, pero no pudo hacer nada contra la mala suerte, el infortunio en forma de lesiones y las decisiones desacertadas de los colegiados. Durante todo el partido se dio la sensación de que el partido podía decantarse hacia nuestro lado, pero cada vez que lo tuvimos ahí surgía algo que lo cortaba de raíz. Así cuando el equipo comenzó a asentarse y a meter peligro en cada acción vino la lesión de David que nos dejó a todos fríos. Cuando después de levantar el 2-0 por mediación de Delín y podíamos ir al descanso con el empate, los colegiados se tragan un penalti de libro a Bruno. Ya en el segundo tiempo y con el equipo mandando sobre el terreno viene la expulsión de nuestro capitán que posibilita la superioridad del rival haciendo el 3-1. Aún así y con el equipo sin dos de sus pilares alcanzamos el 3-2 por medio de Jandro.Volvíamos a estar dentro del partido pero fallamos varias ocasiones claras y los palos desbarataron otras hasta llegar a la expulsión de Delín que nos vuelve a dejar cojos y sin tiempo ni recursos para intentar nada más.
No pudimos este fin de semana traer algo positivo de Pontevedra y no fue por no merecerlo, porque hay que decir el equipo hizo los deberes, pero no pudo hacer nada contra la mala suerte, el infortunio en forma de lesiones y las decisiones desacertadas de los colegiados. Durante todo el partido se dio la sensación de que el partido podía decantarse hacia nuestro lado, pero cada vez que lo tuvimos ahí surgía algo que lo cortaba de raíz. Así cuando el equipo comenzó a asentarse y a meter peligro en cada acción vino la lesión de David que nos dejó a todos fríos. Cuando después de levantar el 2-0 por mediación de Delín y podíamos ir al descanso con el empate, los colegiados se tragan un penalti de libro a Bruno. Ya en el segundo tiempo y con el equipo mandando sobre el terreno viene la expulsión de nuestro capitán que posibilita la superioridad del rival haciendo el 3-1. Aún así y con el equipo sin dos de sus pilares alcanzamos el 3-2 por medio de Jandro.Volvíamos a estar dentro del partido pero fallamos varias ocasiones claras y los palos desbarataron otras hasta llegar a la expulsión de Delín que nos vuelve a dejar cojos y sin tiempo ni recursos para intentar nada más.
Una pena, pero nos quedamos con la actitud y la entrega del equipo quizá ante el peor rival que podíamos encontrar para la primera jornada y fuera de casa. Con esas ganas y olvidándonos de los árbitros podemos llegar lejos.
